domingo, 13 de septiembre de 2009

Dos mujeres

A. era fantástica, tan jovial como bella. Pasar las horas a su lado era puro entretenimiento. Un ser abierto, alguien capaz de poder hacer de la imagen más común, de la más insustancial, una conversación amena o profunda, ésto ya dependía de ella. Tenía un espíritu sustancial de liderazgo en la pareja, no podías negar sus proposiciones -por muy burdas que fuesen- porque sus motivos -por muy burdos que fuesen- te rodeaban abiertamente convirtiendo en deseo todo lo que comentase. Y era la mejor halagadora posible, no porque te recordase que estaba a tu lado incondicionalmente, que le habías ganado con fidelidad y empaque, no porque te dijera que eras una magnífica persona y atractivo para ella hasta decir basta. No era éste el motivo de esa cualidad, todas esas palabras eran superadas ampliamente por un gesto, un gesto característico e inconsciente, la mejilla apoyada en su mano derecha y un profunda mirada, unos ojos clavados que casi dolían, la mezcla entre inocencia y violencia. Ahí A., sin hablar, podía hacerte sentir el hombre más poderoso al saber que eras objeto de su mirada. Era el único momento en el que A. podía mantenerse en silencio, un corto trecho de tiempo pero que se alargaba por su frecuencia. Por eso no podías elegir nunca cuál era la situación en la que A. podía considerarse más guapa, porque te quedabas admirado cuando parloteaba como una cotorra mentando a hormigas trabajadoras o a chistes verdes de su tío e igualmente prendado cuando el mundo se apartaba para recibir ese repetitivo e intuitivo gesto. Era impulsiva, si tenía que apartar el paraguas de tu lado ante una tormenta para que la abrazaras “como es debido” -que decía ella- lo hacía, y si tenía que despojarse de su pequeño pantalón para que notarás su ardiente cuerpo en un concurrido parque, también lo hacía. A. no sólo era entretenida y convincente, A, era fantástica.

Pero es que B. era fantástica. Hablaba más bien poco, pero no podías evitar sentir pura comodidad ante su compañía. Podías sentirte aliviado, andabas con ella a un ritmo endiablado sin ningún destino y podías considerarte el más afortunado simplemente por ser irradiado ante ese ataque de personalidad, demostrada sin hechos. Su influencia era curiosa, conseguía convertir al indeciso en alguien impasible en sus ideas. Podía -y de hecho, lo hacía- convencerte de que tu opinión era la más adecuada, la correcta. Haber estado con alguien más como ella sería sinónimo de aburrimiento, pero con B. todos podían sentirse en el culmen de su optimismo personal. Yo siempre se lo comentaba, se te ha concedido un don poderosísimo, convertir al novato en experto, al necio en sabio. Y dentro del don se encontraba la facultad de saber hacerlo efectivo. Pero ella sólo me quería a mí, podía haber estado con cualquiera que la conociese porque era inevitable no sentirse atraído por esa poderosa forma de ser -y por esa larga melena, lisa, no sabía decir si era marrón o negra, pero sí podía afirmar que ése era mi color favorito-. Sin embargo, ella eligió acompasar esa rápida carencia a mi lado, mientras sorteaba su ruta instantánea, mientras comíamos en silencio y mientras hablábamos en silencio. B. era frágil, pero en la fragilidad se encontraba un encanto irrepetible, B. era triste, pero en su tristeza residía tu alegría. B. era indescriptible y a pesar de eso, sabías como iba a actuar ante cada situación. B. era, sobre todo, fantástica.

Estar enamorado de una mujer era mejor que no estarlo. Estar enamorado de dos mujeres era mejor que estar enamorado de una.

17 comentarios:

  1. Uuuuuhh!!! Cómo huele a proyección por aquí!! xD xD
    Jajajaja, ¡es broma Currele! Bienvenido por aquí de nuevo. De todos modos, hay que ver como me ha recordado a mA.ricarmen el primer párrafo...

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  2. Joder, Curro, menudo texto más empalagoso. No me gusta lo más mínimo.

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  3. Lo único que se puede decir, chapó.

    Vosotros desayunáis literatura por las mañanas, no hay otra explicación para estas cosas.

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  4. Qué hijo de puta eres Antonio, lo peor es que ahora es cuando hablas en serio xD.

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  5. Que va, tío, pero me encanta saber que se te ha cambiado la cara al ver mi comentario xD.
    Hablando en serio, me parece que no has caído en la ñoñez. Estar enamorado no es ñoño. Ñoño es estar enamorado de tus labios de miel a la luz de la luna.
    Sigo viendo a A. como un personaje mucho más marcado, mucho más fácil de reconocer, mucho mejor descrito. De todas formas creo que es genial que B. exista.

    P.D: Este texto ha pasado la prueba del cimbrel.

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  6. Yo prefiero estar enamorado de sus labios de miel a la luz de la Luna, es que sino no vale la pena estar enamorado.

    Me encantan las cosas empalagosas.

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  7. Jajajajaja Jose es de los mios!! De todos modos, la A es MC te pongas tu como te pongas Curro picha.

    PD:La prueba del cimbel ¬¬?

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  8. Primo, que Pedro sea mariquitiqui-cuevero es aceptable, pero que lo seas tú es doloroso. Con lo que tú has molado siempre...

    P.D: Ya te comenté lo de la Regla del Cimbrel en el concierto de --:**RoBeRtiTuUuUh & SuS NinIiIiIoO0O0o0O0O0os**:--.
    Como es algo que debe saber todo el mundo, lo repito aquí mismo:
    No leeré ninguna entrada más larga que mi cimbrel, ni ningún comentario más largo que el ancho del mismo. Esta ley podrá ser modificada o abolida cuando me salga de las pelotas (habrá una votación entre ellas dos y yo).
    Hala, ya he soltado mis burradas de hoy.

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  9. XDDDDDDD El concierto de las mas locas, os shero LoOoKiIissssSS!!! xD xD xD

    Di que no muro, ¡diabetes powa!

    PD: Aclaración a los ajenos a nuestra vida social, el sábado (o el viernes¿?) Antonio y yo coincidimos en un concierto de pop-rock (a veces blues, a veces ninguno de la anterior) del grupo de nuestros amigos: Libertad Condicional. Háganse una idea. La amistad está por encima de ciertas cosas.

    PDD: Realmente no son nada malos ni tan estilo de perrito caniche mojado (no siempre), pero es una gozada darles caña.

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  10. Discrepo con Antonio cuando dice que B está peor descrita. Tal vez constituya un perfil menos común (estoy deseando conocerla, ya me la presentarás). Creo que te sigo, creo que has hecho dos buenas descripciones. Además, han generado un interesante debate sobre la posibilidad del enamoramiento "doble".

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  11. Molan más los labios de miel a la luz de la Luna digas lo que digas.

    Yo creo que es necesario que existan personas romanticas, me da igual que te parezca una mariconada, a mí me encanta.

    Me molo a mi mismo.

    Saludos gatunos,

    Mufasa.

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  12. Pedro, me ha gustado este nuevo post, aunque para ser sincero, hoy lo que busco es alguien que escriba sobre la muerte vista desde una óptica literaria no convencional Estaba pensando en Saramago pero creo que su visión de la Parca es un tanto pesimista. Bueno, hoy a pesar de que siempre digo que no soy creyente me gustaría leer algo que se remita a la muerte pero con un nuevo estilo. Lamentablemente esta palabra ha pasado varias veces por mi mente, cuanta gente querida se ha ido esta semana.
    Se te ocurre alguna idea? , claro, idea literaria.

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  13. Eso de enamorarse de dos personas a la vez, me suena, vaya que me suena, y me gusta, jaja. Es que en mi pueblo dicen: las cosas no son del dueño, sino de quien las necesita!

    un saludo

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  14. Rafael, no te olvides de felicitar al autor de esta entrada: Curro (os presento, Curro Rafael, Rafael Curro). Es un placer y un orgullo poder ofrecer cosas que os gusten.
    Sobre lo que comentas... Aún así yo probaría con "Las intermitencias de la muerte", de Saramago. DEsde luego es un nuevo enfoque a la hora de tratarlo. ¿Y Vargas Llosa?

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  15. Gracias Pedro, no había tenido la amabilidad de felicitar a Curro, Felicidades!. Qué tema este che, todo un tema. Sí es mejor estar enamorado de una mujer que de ninguna, y mucho mejor de dos... A quién no le ha ocurrido? , supongo que a nadie...Qué complejo es evitar verse seducido por esa "droga" que tiene el encanto femenino..., es muy difícil..., cada una tiene lo suyo y además están entrenadas para que caigas como un bobo. Bueno..., lo complejo de estar "enamorado" de dos mujeres al mismo tiempo es que a la larga se convierte en un problema y en una tortura cuando te descubren. Muy buen relato Curro, felicidades.

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  16. Que cierto es que es una tortura y un problemón.

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