martes, 23 de noviembre de 2010

Equipazos

A eso es lo que yo llamo potencial de mercado, poder logístico suficiente como para reforzar tu plantilla sin la necesidad de invertir demasiado capital. Tienen capacidad de convicción, atraen a los jugadores a sus plantillas a base de falacias convertidas en verdades universales, de discursos vacuos disfrazados de libertad o de igualdad. Promesas adornadas de comunión y progreso. Y consiguen lo que quieren, un grupo de componentes ensamblados, unidos por una misma idea, que se mueven por el campo desatando a la perfección sus funciones y convirtiendo a las instituciones resaltadas en máquinas invencibles, en conjuntos invictos.

Así van moviéndose los dos grandes partidos políticos, atrayendo con sus posibilidades y su omnipresencia a todo jugador válido (a todo jugador) para poseer un proyecto indestructible de cantera. Sin contratos, pero con palabras.

Y bueno, uno puede darse cuenta con facilidad y casi admirar como funciona el engranaje de esas potentes plantillas. Puedes acercarte a un corrillo universitario que hable en la cafetería de la Facultad, a la mesa de algún pub irlandés o puedes ir dando saltos entre blogs buscando el juego de estos deportistas de las palabras.

Pero normalmente juegan a escondidas. Te dicen (si les preguntas): “No, yo no soy un borrego. Yo tengo capacidad de crítica. Yo sé diferencias lo positivo y lo negativo de cada partido. Yo no soy pepero. Yo no soy socialista español. Yo soy liberal. Yo soy de izquierdas. Yo no tengo claro a quién votar pero sí a quién no votar. Yo. Yo. Yo. Yo. Yo.”

Todo eso para luego competir tan descaradamente que es inevitable que uno no pueda darse cuenta de en qué equipo están jugando, de en qué liga se encuentran. Luego los escuchas, los ves jugar y te encuentras con un engranaje perfecto, con la maquinaria que trabaja a destajo día a día bajo el sol de las mismas ideas. La línea no falla, el antitaurino es de izquierdas, el pro taurino de derechas. El propalestino de izquierdas, el proisraelita de derechas. El prosaharaui de derechas, el que defienda a Marruecos de izquierda. Se autodenominan equidistantes y el de izquierdas sólo habla de Irak, de Camps o de Fabra. El de derechas sólo de Gal, Guadalajara y la crisis. Trabajan a destajo hablándote de todo lo que les inculcó su entrenador, te intentan convencer aportándote datos, fechas y épocas donde la corrupción, la guerra o la mentira de su rival se convirtieron en hechos. Y te dicen de nuevo que son equidistantes. Pero te comparan. El cien por cien de las veces comparan y decantan la balanza hacia su lado. Con datos en las cafeterías, con gráficos en lo blogs. De la forma que sea.

Y después acusan a la masa de inculta y de no informarse, de no jugar en primera división con ellos, sin darse cuenta de que no son más que esclavos de unos chupópteros que les hablaron de equipo, de capacidad, de cultura, de crítica. Pero que nunca mencionaron que no eran más que soldados inertes de un ejército de tiniebla de política y de bipartidismo férreo. Sin darse cuenta de que la observación, la opinión propia y la verdadera libertad erradicaría el totalitarismo de esos dos grandes equipos, convirtiendo nuestra Liga en algo más justa de lo que es ahora.

7 comentarios:

  1. Más allá de la redacción texto, me parece magistral el paralelismo fútbol-política que utilizas como columna vertebral. Es totalmente así. Por más equipos que haya inscritos en primera división, a la hora de la verdad, la Liga es sólo cosa de dos. Y el que trate de convencer de lo contrario, miente.

    Por cierto, ese es el típico artículo que escribiría ahora mismo uno del PP... que se te ve el plumero, currele...

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  2. Es horrible que al final todo quede entre dos. Tristemente, nos engañamos creyendo que estamos ante un dilema, cuando en realidad las opciones son múltiples (el "falso dilema", por cierto, está registrado como prejuicio cognitivo). Todo es fruto de nuestra ceguera mental y nuestro primitivo maniqueísmo. Menos mal que yo soy y siempre seré del Albacete.

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  3. A mí lo que me molesta de verdad es la Liga no los equipos. Los equipos a fin de cuentas se van a intentar beneficiar con lo que puedan.

    Por lo demás decir que me encanta tu comparación.

    Saludos.

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  4. No, sí, yo comprendo a los equipos. Lo que quiero decir es que aparte de la Liga, me molestan los jugadores de los equipos. No sé si me explico xD

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  5. A mí también me molesta que jugadores de tercera jueguen en primera. Pero es o que hay y no es un consuelo, precisamente.

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  6. Es terrible. Prácticamente cualquier simplificación implica de forma inequívoca una pérdida de información, una imprecisión en el conocimiento y, en definitiva, un sesgo de la realidad.
    Por ello son tan perjudiciales el maniqueísmo, los bandos, el rojos contra grises.

    P.D: Me siento muy orgulloso de llevarme muy bien con Curro a pesar de su ideología extremista.

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  7. De izquierdas!, que lo dice mi padre!

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