martes, 28 de julio de 2009

Por terminar de aclarar las cosas (buenas noches, señora, recuerdos a su señor)

La gente no es tonta. La gente habla, comenta, ve, oye, piensa, calla y cacarea. Tanto es así que la dragona del quinto sabía que las bragas que se le cayeron al patio las estaba usando la gigante del bajo izquierda. Pero jamás se lo recriminaría, principalmente porque la enorme mujer estaba extorsionándola en silencio. La dragona estaba dispuesta a perder algunas bragas a cambio de que su vecina no se chivara de que la vio robando en la panadería.
Por cierto, que era por todos conocidos que el panadero, Manolo el centauro, vino hace poco al pueblo tras separarse de su mujer, y que ahora su ex, la centaura, estaba arrejuntada y viviendo en pecado.
Pero todos sabían que no vivía sola con su nuevo novio sino que entre los dos estaban criando al hijo que él tuvo con su anterior pareja.
Todo se sabe y todo se comenta.
Por ejemplo, sin ir más lejos, el hijo bastardo de la reina consorte del Rey Arturo sabía que era el hijo bastardo de la reina consorte desde que tenía uso de razón.
Era lógico y casi insultaba a su inteligencia que sus padres adoptivos disimularan para intentar hacerle creer lo contrario. Tenía su misma altura y sus mismos ojos. Además, siempre le había resultado extraño que su supuesta madre tuviera cuatro patas y él solamente tuviera dos.
Por no faltar a la verdad diremos que el muchacho no sabía a ciencia cierta que su madre era la reina consorte del Rey Arturo. Siempre le quedó cierta duda razonable, pero como siempre fue un chico muy tranquilo, se lo callaba por no convertir su vida en un culebrón. Además su madrastra era muy buena con él y lo cuidaba con cariño y entusiasmo.
Pero se comentaba, se decía, se murmuraba…
Además, en clase de biología vieron que del cruce entre un orco rubiales de 1’80 y una enana, lo que sale es un pequeño troll con fuerte propensión al hipo.

P.D: Como ya dije en algún comentario, esto es lo último que tengo pensado hacer de Realidades Perpendiculares por no perder el espíritu de la saga. De todas formas, no descarto continuar porque tengo muchas ideas para seguir. Todo se andará.

"Cuando Dios cierra una puerta deja de haber corriente"

4 comentarios:

  1. Nunca hubiera imaginado que la letra de una canción de Bertín Osborne sería el título perfecto para uno de tus textos.

    Mola.

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  2. Jajajajja Sí, la gente comenta demasiado. Una pena que no hay más realidades perpendiculares, era refrescante :-)

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  3. :') Gracias a Dios por habernos dado esta gran serie. Requiem por RP.

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