Si no me equivoco, la finalidad de las condenas en nuestro país es la protección de los miembros de la sociedad, la disuasión a los posibles delincuentes y la reinserción del condenado.
Y sin embargo, un hombre se enriquece siendo un corrupto y, cuando lo condenan por corrupción, sale libre bajo fianza. Una fianza que seguramente ha ganado con sus corruptelas.
El resultado es un ladrón que se queda en la calle por darle a la policía una pequeña parte de lo que ha robado, una palmadita en la espalda de quienes tuvieran pensado delinquir y un mozo que habiendo obrado mal no tiene ningún motivo convincente para no volver a hacerlo.
La justicia es ciega, y a veces parece gilipollas.
P.D: Muy cortito, para variar.
"Ay, si es que no nos queda ni el voto útil"
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Buah! Cortito pero perfecto. Me ha encantado, además es que hoy hablaba mientras desayunaba de eso con mi padre. No te falta razón el lo de la justicia es ciega y aveces gilipollas, yo diría que a veces es hasta corrupta. Me gustan tus guantás cortitas y concisas jejeje
ResponderEliminarPD: Hoy publico yo en!!
Tochaco. Pero bueno, no pasa nada. Me ha gustado bastante.
ResponderEliminarSiempre dije que aquellos minimalismos tendrían efectos secundarios...
De verdad que no sé si lo que he dicho es una tontería, pero no veo por dónde cogerlo.
ResponderEliminarOye, Pedro, podrías tomar una medida reactiva a la Regla del Cimbrel y no leer los textos cortos :D.
P.D: Ale, no seré yo el que evite que tú nos regales una de tus pérdidas de tiempo.